Tres meses y ya tiene que enfrentarse a cambios importantes y muy difíciles para ella.
Ayer empezamos con el bibe (de mi leche) porque en tres semanas me toca reincorporarme al trabajo. No le gusta nada. Cosa que teniendo en cuenta que el chupete no lo quiere ni ver... La pobre no quiere el biberón y ha cogido tal berrinche que hoy por primera vez la hemos visto llorar con lágrima.
Se me parte el alma pero tiene que ir acostumbrándose. Espero que se acostumbre pronto porque yo no sé si aguantaré muchos días oyéndola llorar de esa forma.
Mil besos
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